What the Fuckin’

27/01/14, Music Hall, Barcelona

Ir al Music Hall de concierto mola. Porque suena muy bien y es una sala acogedora. Además beber en cerveza en botella es un gustazo. Y ese patio interior… Si a todo eso le añadimos que nos íbamos de cumple a celebrar el veinte cumpleaños de Mondosonoro y que íbamos a ver a Fuckin’ Bollocks, tenemos un planazo. No es ningún secreto que somos fans de Fuckin’ Bollocks. Ellos y la historia de Record Store Day Spain tienen una estrecha relación y es bonito ver como ambos crecemos a la vez. Y como los amigos de toda la vida, siempre estamos ahí. Y es que aunque uno quiera quedarse al margen emocionalmente, musicalmente debe rendirse de nuevo al poder de los Fuckin’ al verlos en las tablas.

JysusAbrieron la noche Jysus, colaboradores también de RSD que nos dieron una buena lección de folk. Los músicos encabezados por el asturiano Isaac Mangas mostraron un directo denso, con momentos country y ráfagas psicodélicas altamente atractivas. Temas como It was Fine o I Dreamt a War no hacen más que dejarnos claro que pisan fuerte. Sin duda alguna su mini LP de seis temas es altamente recomendable. Les seguiremos la pista.

 

Ya con la sala calentita empezaban los chicos malos de Fuckin’. Siempre con esa energía positiva y empática que te hace sonreír con facilidad. Quizás cualquier tecnicismo ofenda su propuesta. Molan. Los tipos molan y cada disco que pasa molan más. Tienen el don de gustar a cualquier tipo de público porque sienten lo que hacen y eso, aunque parezca sencillo, no lo es. Defienden cada tema como si fueran sus últimos tres minutos de vida. Además, como es sabido la sala barcelonesa suena a las mil maravillas y no fue difícil convertir aquel cumpleaños en una gran fiesta. Las canciones de su último trabajo sonaron menos garageras que de costumbre.

 

Fuckin' (2)

 

Tienen ahora un rollo más rock con sus tres guitarras presentes de manera omnipotente. International Bikini Allstars es un disco súper completo sin fisuras que nos invita a saltar birra en mano con Sweet Virginia (se nota que se ha fabricado en la furgoneta de la banda, buen rollo a raudales), a querernos más con un temazo como I Told You So, a vibrar con la energía de I’ve Been Waiting For So Long, a hacer el beatle con The House Of The Hill, o a flipar con un hit  como Love Can Fuck It All (si yo me encargara de buscar el tema del anuncio veraniego de Estrella lo tenía clarísimo vamos…). También se agradece echar la vista atrás con animaladas como Congo y su harmónica salvaje o puñetazos en la mesa como Vox. Eso sí, cincuenta minutos con ellos parecen una cruel broma. El dicho de lo bueno si breve dos veces bueno no funciona con los Fuckin’ Bollocks. Deseando que llegue el Primavera Sound para verles.

 

Crónica y fotos: Sergio Pozo