17/11/15 Sala Bikini, Barcelona
Cuando el inglés Chris Corner dejó Sneaker Pimps para dar vida a su proyecto en solitario parecía que por fin iba a dar el salto a la fama. Su estética y su segundo disco, The Alternative, ponían aún las cosas más evidentes. Pero el mundo de la música es caprichoso y ese éxito de masas parece no llegar jamás. IAMX sigue alejado de las performances en pabellones para apabullarnos con su espectacular puesta en escena a menos de un metro.
La sala Bikini con una entrada más bien pobre otra vez más. Parece que Chris Corner sigue sin trascender. Lo que es evidente es que los que estuvieron allí volverán a verle la próxima vez porque su proyecto lo tiene todo para agradar. Las cuatro pantallas con un montaje audiovisual perfectamente acompasado con la música, una estética industrial bestial, una voz que maravilla y un aire de star que impregna con facilidad el ambiente.
La conjunción de voces con las chicas del combo es excelente y Chris hace con su voz lo que quiere: sube, baja, agudiza… una pasada. Los momentos de mayor celebración llegarían con los temazos de su segundo trabajo como After Party I Die, el himno Spit It Out o la canción que da nombre al disco, The Alternative. Hapiness, que tanto recuerda a NIN, se muestra vigorosa en directo pero lo que realmente mola de este tipo es cuando se pone en plan festivo como en Aphrodisiac y te hace botar maldiciendo que mañana sea día laborable.
Por poner alguna objeción a aquellos que gritaban a los cuatro vientos que aquel fue el concierto del año, creo que abusó de temas tranquilos haciendo bajar en exceso la intensidad del show por unos minutos. Excepto este apunte, el excéntrico inglés escondido tras su maquillaje dejó claro de nuevo que ha nacido para ser una estrella. El tiempo nos dará la razón.
Crónica y fotos: Sergio Pozo